Cuando hablamos de turismo en el Perú, se nos viene a la mente ciudades de la macro región norte como La Libertad, Lambayeque, Amazonas, Loreto, en el sur regiones como Cuzco, Puno y Arequipa, y en el centro Huánuco, Junín, además de Lima, como las regiones más representativas de un sector que ha generado en el sector hotelero inversiones en el año 2011 por $US 270 millones[1], que ha empleado más de 270 mil personas en servicios de restauración[2] y cuya participación global en la generación de riqueza del país (PBI) es de 3.70%[3].
Asimismo, se espera que a fin de este año 2012 el flujo del turismo receptivo haya crecido un 7.6% respecto al año anterior, siendo Chile y Estados Unidos, en ese orden, los principales generadores de visitas hacia el Perú con un total de 1, 031,185 turistas y que el turismo interno registre un incremento del 4.11% también respecto al año anterior con un global de 3, 900,000 personas que utilizaron algún tipo de establecimiento de hospedaje con motivos de turismo[4].
¿Cuál es el papel de Tacna en el sector turismo?
Tacna, una ciudad considerada solo como una puerta de entrada hacia el país, ciudad de “transito obligado” o sencillamente la “ciudad de la zona franca”, ha experimentado un crecimiento exponencial en su registro de visitas de turistas principalmente extranjeros de turistas extranjeros. Además, si consideramos que según cifras oficiales del 100% de visitas de extranjeros al país, el 29% son chilenos[5], dichas cifras posicionan a Tacna como la segunda ciudad receptora de turistas, solo detrás de Lima.
Pero, si bien es cierto estas cifras son alentadoras, también suponen un gran reto para el país y en especial para la región Tacna, ya que se espera que el turismo se convierta al finalizar el año 2012 en la tercera actividad generadora de divisas del país, con un total de $US 3,300 millones generados por la llegada de aproximadamente 2.85 millones de visitantes extranjeros[6]. Entonces, la pregunta natural es: ¿Estamos actualmente atendiendo de manera correcta la demanda de servicios en la región?, A continuación desarrollaremos dicha interrogante:
¿Estamos atendiendo correctamente a la visita?
Precisamente, para entender la calidad de nuestros servicios actuales es que vamos a referirnos en primera instancia al sector hotelero. Según cifras emitidas por el Centro de Investigación Aplicada del Neumann Business School (gráfico 01), podemos apreciar que el nivel de satisfacción del turista una vez que recibió el servicio y se retiró del hotel, es en promedio aceptable. Teniendo al turista extranjero con un ponderado de 1.14 como más satisfecho que el visitante nacional, que registra un ponderado de 0.87. Pero, si bien es cierto los hoteles y hospedajes han aumentado de acuerdo al requerimiento de la demanda en cantidad y calidad, todavía no existe gran inversión en el sector, por lo que nuestra región tiene el reto de atraer parte de esos $US 1,500 millones que entre los años 2013 y 2017 se planean invertir en el sector hotelero[7]. Además, debemos considerar que los niveles de pernoctación todavía son menores, con un promedio anual de 1.39 días para los turistas nacionales y de 1.50 días para los turistas extranjeros[8], lo que hace que cada visitante principalmente chileno no gaste más de $US 60 diarios. Es aquí, donde todavía existen tareas pendientes de parte del empresariado privado y de las entidades estatales que deben enfocarse a consolidar un flujo de turismo constante que soporte una mayor inversión hotelera. El turismo corporativo podría ser un camino a tener en cuenta por el empresariado local.
En el sector restaurantes, los resultados a la pregunta que mide el grado de satisfacción respecto al servicio recibido (gráfico 02), no difieren de la tendencia reflejada en el sector anterior, ya que los turistas nacionales con un ponderado de 1.00 y los extranjeros con un 1.23, reflejan su aceptación a la atención que recibieron en los restaurantes que visitaron. Quizá, este sea uno de los sectores que más ha crecido en los últimos años junto al “boom” gastronómico de la última década, pero aquí debemos señalar que del total de mano de obra empleada en los restaurantes el 67% solo tiene educación secundaria y cuya tasa de informalidad alcanza un promedio nacional del 68%[9]. En base a lo descrito anteriormente, es que debemos orientar todo esfuerzo a la capacitación y formalización del rubro para poder atender turistas nacionales cada vez más exigentes y turistas extranjeros que están satisfechos con la variedad gastronómica, pero que empiezan a exigir insumos de mayor calidad y mejor calidad de servicio.
En el caso de los servicios médicos, un mayor porcentaje de turistas extranjeros son los que visitan algún especialista médico o afín. Además, los servicios más requeridos son los odontológicos 54% y oftalmológicos 24% (gráfico 04) brindados por establecimientos privados y el Hospital de la Solidaridad, lo que hace que negocios similares proliferen sobre todo en el centro de la ciudad. Es aquí, donde las entidades gubernamentales tienen la tarea implementar acciones de control orientadas, primero a verificar la idoneidad del servicio que brindan estos establecimientos a los turistas y segundo, supervisar su aporte al fisco para evaluar su contribución a la economía local, ya que si bien es cierto en su mayoría los visitantes expresan satisfacción respecto al servicio recibido, debemos considerar también que 1.2 de cada 100 personas manifiesta haber sido engañado alguna vez[11].
Precisamente, para poder rebatir nuestras deficiencias en la oferta turística es que los servicios turísticos de Tacna deben expandirse y diversificarse, para evitar que producto de una demanda insatisfecha, esta tienda a retraerse y desviarse hacia otros destinos. Decimos esto, porque todavía la Catedral, la Alameda y la Plaza de Armas representan para el turista los principales atractivos de Tacna, dejando de lado otros atractivos que podrían satisfacer las necesidades del turista cultural, al buscador de experiencias, que requiere mayor variedad de servicios y que además genera mayores ingresos a la región.
Otro aspecto a tener en cuenta es conocer cuáles son para los turistas los aspectos negativos y positivos respecto a la ciudad. En relación a los aspectos positivos, lo primordial es que somos considerados una ciudad económica, que trata bien al turista y que tiene una gran variedad comercial y gastronómica. Pero, la asociación negativa esta principalmente orientada al caos vehicular, la delincuencia y el desorden.
Finalmente, concluimos que si bien es cierto Tacna recibe un gran flujo de turistas, los servicios turísticos de hostelería, restauración, médicos y comerciales han crecido en cantidad, variedad y calidad, aún estamos lejos de ser una ciudad como Arequipa que prevé inversiones hoteleras compartidas con otras ciudades por aproximadamente $US 98 millones, además de mantener aún una demanda desatendida en hoteles de 5 estrellas. También estamos lejos de Cuzco, que proyecta recibir en los próximos 4 años una inversión en el sector hotelero por US$ 250 millones con la construcción de 10 nuevos establecimientos[12].
Esperemos entonces que Tacna no desaproveche la oportunidad que el turismo le ofrece, ya que estamos ante un sector que genera impuestos para los gobiernos locales, crea puestos de trabajo directos e indirectos, fomenta el cambio de valores sociales y que además tiene como consecuencia directa, el fortalecimiento del consumo interno.
[2] www.apega.com.pe
[3] http://www.observatorioturisticodelperu.com/mapas/pbisturi.pdf
[4] http://www.observatorioturisticodelperu.com/mapas/doce.pdf
[5] www.mincetur.gob.pe
[6] www.canatur.gob.pe
[7] http://peru21.pe/economia/turismo-se-convertira-tercer-generador-divisas-al-cierre-2012-2106144
[8] www.mincetur.gob.pe
[9] MTPE Programa de Estadísticas y Estudios Laborales 2011
[10] Centro de Investigación Aplicada de la Neumann Business School, “Análisis de la oferta turística en Tacna”
[11] Centro de Investigación Aplicada de la Neumann Business School, “Análisis de la oferta turística en Tacna”
[12] www.canatur.gob.pe
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